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Hay enfermedades que afectan especialmente a la comunidad latina como la diabetes y la obesidad. La raíz podría estar en el dinero más que en la genética. 

Muchos latinos inmigrantes llegan con poco o ningún conocimiento del inglés. Para el Dr. Eduardo Ochoa, el principal problema de salud entre los latinos no es la enfermedad sino la barrera del idioma. “Los padres llevan a sus hijos como intérpretes”, dice Ochoa, pediatra y profesor de la Universidad de Arkansas para las Ciencias Médicas en Little Rock.

Los centros de salud del estado han contratado asistentes bilingües pero la situación es siempre difícil en las zonas rurales, dice Ochoa.  

Otros problemas que afectan a los latinos, según Ochoa son obesidad, falta de atención adecuada a la salud mental y a los problemas relacionados con la pandemia. La causa frecuente de estos problemas es la situación económica y social de las familias.

“Los problemas sociales impactan la salud de la gente que no tiene techo y alimentación asegurados y están expuestos a la violencia”, dice Ochoa. “Las familias con frecuencia tiene que decidir entre pagar la renta o comprar comida”.

A veces las familias pueden pagar su vivienda pero esta es de mala calidad, como vehículos rodantes que nunca son reparados. 

Otro problema es el acceso a seguro médico en las familias inmigrantes. “Si el niño sufre un accidente o tiene un problema de salud catastrófico la familia no podrá pagar ni la renta ni los alimentos”, dice. 

Las carencias económicas traen problemas como la violencia entre adolescentes con armas de fuego, riesgo de suicidio, sobredosis de drogas, uso de marihuana y alcohol, manejo imprudente y los peligros de ser detenidos por la policía por manejar sin licencia o simplemente “por la forma como luces o como hablas”, dice Ochoa. 

Asimismo, el problema de la obesidad puede tener raíces culturales. Existe el mito de que un niño regordete es un niño saludable “pero para nosotros es tener sobrepeso”, dice Ochoa, agregando que la comida en los países de origen es siempre mejor que la comida rápida de Estados Unidos.

Por otra parte, la diabetes no diagnosticada afecta al 4.4% de la población latina, comparado con el 2.7% de la población blanca no latina, según el Centro Para el Control de Enfermedades. El costo de la insulina se ha duplicado en los últimos años creando nuevos problemas para los enfermos.